LA MURALLA TOMA PARTIDO POR NUESTRAS RAÍCES.

POR LAS VOCES PROHIBIDAS EN LAS PÁGINAS DE LA HISTORIA OFICIAL.

POR LA MEMORIA ACTIVA, POR UNA JUSTICIA POPULAR Y SOCIAL.

LA MURALLA TOMA PARTIDO POR LOS VERDADEROS REFERENTES

QUE LUCHARON Y LUCHAN POR UNA HUMANIDAD MEJOR.

LA MURALLA TOMA PARTIDO POR NUESTRA GENTE, COMPROMETIDA Y SOLIDARIA.



29 de marzo de 2010

LA COMUNA DE PARIS

La burguesía sintió que el mundo se detenía, todos habían posado sus ojos en ese lugar donde se estaba cuestionando su poder, se dio cuenta que ese era realmente su enemigo, quizás su único enemigo real, esos, los ‘usurpadores’ habían demostrado que un mundo sin explotados ni explotadores era posible. En aquél mes de marzo de 1871, la clase obrera se animó a intentarlo y el mundo capitalista tembló al ver que todos sus argumentos se desvanecían , de nada valen los argumentos de que hay un capitalismo mas ‘humano’. O se es capitalista y se asume su lógica perversa o se es socialista y se construye un mundo nuevo.

A fines de 1870 Francia estaba bajo el poder de Napoleón III, sobrino de Bonaparte, y éste había llevado a Francia a una aventura bélica contra Prusia, tal como hacen los dictadores ya que, si ganan de llenan de gloria y si pierden, la sangre que se derrame en la contienda siempre será la de la clase obrera, nunca la propia. Esta aventura termina con una aplastante derrota de los ejércitos franceses y con los ejércitos prusianos sitiando París, ya que era la ciudad que aún no habían podido tomar. En la batalla de Sedán prácticamente todo el ejército francés cae prisionero y los vencedores imponen duras condiciones para firmar la paz. La alta burguesía parisina, ante el vacío de poder nombra a Louis Thiers para negociar con los prusianos ese pacto de ‘caballeros’, seguros de hacer pagar al pueblo la indemnización de guerra y que todo siguiera como estaba. El tratado de paz, conocido como tratado de Frankfurt, contenía durísimas condiciones que incluían que el ejército vencedor desfilara por la capital francesa, además de sumas exorbitantes de dinero como ‘reparación’. El repudio de los parisinos al ver lo escandaloso de la capitulación no se haría esperar. El gobierno de Thiers se dispuso a aumentar los impuestos al pueblo para pagar al Bismark el precio de la derrota, sin importarle que el pueblo ya estaba pasando una hambruna producto de la guerra.

Una de las pocas fuerzas que habían quedado en París, eran las Milicias Urbanas, pertenecientes a la Guardia Nacional, que estaba fogueada en la lucha por haber defendido la capital ante el ataque prusiano y que tenía un bien ganado prestigio popular que lo había visto detener el avance del enemigo y que además era famosa por tener un funcionamiento muy democrático. El gobierno se da cuenta que sumando el malestar popular, mas milicias bien armadas y mejor entrenadas y fogueadas en combate, significaban un peligro para su proyecto y se puso a la tarea de desarmarla, sabiendo que, desarmar las milicias era desarmar al pueblo. Pero el pueblo no lo permitió, ya que parte del parque de artillería se había comprado mediante colectas públicas y mantenimiento durante la guerra estuvo a cargo de la población.

Como es fácil suponer, en una París amenazada por el enemigo, con un ejército aún rodeándola, con un pueblo ofendido y hambriento y las milicias armadas que estaban apoyadas por el pueblo, la burguesía siente que su poder se debilita y ordena a Thiers que mande a desarmar totalmente a las milicias, éstas se niegan y piden al pueblo que se opongan a la medida, ese fue el grito de dignidad e independencia de todo París.

Debemos hacer notar que muchos batallones de la milicia elegían sus propios oficiales y los milicianos confraternizaban con la población en los cuarteles barriales, que se usaban también para reuniones populares.

Ante la impotencia, el 18 de marzo, el gobierno ordenó al ejército que tomara los cañones de las milicias por la fuerza, ese hecho desencadenó la revolución. A medianoche, las tropas del régimen se desplazan silenciosamente hacia las afueras de Montmatre, una colina desde donde se domina París y donde la milicias tenían emplazadas sus baterías. Cuando las milicias se dan cuenta, comienza la contienda, los parisinos salen a la calle y se enfrentan con el ejército y esto provoca el efecto mas temido del gobierno burgués, centenares de soldados confraternizan con el pueblo y la Guardia Nacional, al punto que el general oficialista Leconte ordena a su tropa disparar a la muchedumbre que avanzaba, pero sus propios soldados lo arrestan y lo fusilan, junto a Thomas, otro General que había sido represor en la revuelta de 1848.

Una tras otra, unidades del ejército se pasan a las filas del pueblo, el gobernador Thiers, ordena a lo que le queda de tropa abandonar París y toda la burguesía huye a Versalles de modo tan desordenado (como siempre actúa un burgués asustado), que dejan abandonados varios regimientos y muchos de sus oficiales son tomados prisioneros y unos 1.500 soldados se pasan, junto con las armas de sus regimientos a las filas de la revuelta. Otra de las cosas que abandonan en la estampida son las reservas del banco de Francia, que queda a merced de los revolucionarios.

Así las cosas, el Comité Central de la Guardia Nacional, se da cuenta que es la única autoridad en París, y ese 18 de Marzo, ya se inscribía en la historia.

Como primera medida llamó a elecciones libres y democráticas para elegir autoridades la de Comuna y solo una semana después, el 26 de Marzo, 230.000 parisinos acudieron a las urnas a elegir sus autoridades, a nadie le importó que no hubiera partidos políticos formados, que no hubieran líderes ya conocidos para suplantar en el gobierno, supieron desde el primer momento de la lucha que los verdaderos representantes surgen de las asambleas, de las barricadas.

El Consejo Comunal que resultó electo constaba de 92 miembros, la mayoría obreros y artesanos, con una tendencia de izquierda, aunque no muy definida ideológicamente. Un dato para tener en cuenta es que el promedio de edad de los consejeros era de 38 años y el jefe de policía solo tenía 25 años de edad.

Louis Blanqui, un socialista revolucionario es elegido presidente honorario de la Comuna, éste se encontraba preso en una cárcel secreta del régimen anterior y el pueblo lo libera. Así el 28 de marzo de 1871, los cañones de la Guardia Nacional saludan con sus salvas la proclamación de la Comuna de París.

Las cosas no serían fáciles para la Comuna, 4 días después, el 2 de Abril, las tropas de Thiers comienzan las hostilidades para recuperar la ciudad, pero igualmente los Comuneros se dan a la tarea de legislar para organizar la nueva vida de la ciudad.

La primer medida fue disolver la institución ‘ejército regular’ y reemplazarlo por la Milicia Urbana’ es decir ‘el pueblo en armas’. Se perdonan los alquileres adeudados por los trabajadores, se tomaron los edificios y palacios abandonados por la burguesía. Se devolvió al pueblo las herramientas de trabajo que se hallaban empeñadas y se estimuló la formación de cooperativas de trabajo. Una de las medidas que se deben resaltar es la que establecía que toda fábrica o taller abandonado por los propietarios fuera puesto a funcionar por los trabajadores y se abolió el trabajo infantil. También se creo un plan sanitario para el pueblo y la milicia, se abrió el correo y todos los funcionarios de la comuna se pusieron un sueldo igual al sueldo promedio de los trabajadores. Se quitó a las Iglesias el privilegio de controlar mas de la mitad de los colegios y se consagró la separación de la Iglesia y el Estado. Los templos fueron autorizados a seguir con sus ritos y sus misas, pero debían servir, demás, como centro de reuniones y asambleas populares. La educación pasó a ser laica, gratuita y obligatoria. Fueron quemados en la plaza pública la guillotina y demás instrumentos de tortura.

Para los Comuneros, que estaban disfrutando de su IGUALDAD, LIBERTAD Y FRATERNIDAD, todos debían ser libres, todos tenían todos los derechos, hasta la burguesía, y esta equivocada actitud fue aprovechada por los enemigos del pueblo que a través de los hombres de negocios que se habían quedado en París y que los comuneros, en nombre de la libertad no molestaban empezaron a sacar el tesoro del Banco de París y lo enviaban a Versalles, para equipar al ejército que preparaba el gobierno depuesto, y este fue un error fatal (este tema fue analizado por Lenin 50 años mas tarde). En las Asambleas, los comunistas mocionaban para marchar sobre Versalles y destruir el ejército que se estaba formando, pero la mayoría posponía el ataque ya que el tiempo lo ocupaban tratando de organizar la nueva sociedad.

Finalmente, el sábado 20 de mayo, los ejércitos de Thiers invaden París por cinco partes diferentes, avanzan por los barrios caros sin contratiempos y llegan a ocupar el centro de la ciudad, mas de 200.000 hombres avanzaban, lo formaban los restos del ejército original del régimen, mas las tropas del Bismark que se había asociado a su supuesto enemigo, sin importarles que no habían pasado aún 4 meses desde la última batalla que los había enfrentado dejando claro que los únicos verdaderos enemigos eran los enemigos de clase, o sea la clase obrera y que las guerras son, mas que nada negocios que se hacen entre la misma clase para acentuar su poder. También habían reclutado gente de las cárceles y todos los mercenarios disponibles , y con furia inaudita asesinan y fusilan a todo parisino capturado, allí se olvidan de los códigos de guerra y las reglas de ‘caballerosidad’, no se detenía al vencido, se lo mataba sin miramientos. El odio de clase es mayor que el odio al invasor. El 22 de Mayo la tercera parte de la Ciudad estaba en manos de los invasores. Los Comuneros construyen barricadas en los barrios, los niños y las prostitutas eran los encargados de llenar las bolsas y las llevan al frente, mas de 600 barricadas se construyen. Mientras el ejército burgués fusilaba sin juicio previo, los comuneros se negaban a ese trato con los prisioneros, solo fusiló a 6 oficiales capturados y a un obispo que lo encontraron ayudando al enemigo.

El domingo 28 de Mayo, la Comuna había sido derrotada, pero los fusilamientos y la represión siguieron durante meses. En 90 días habían dejado 19.000 muertos y 60.000 encarcelados y deportados.

Apenas 9 años después, los trabajadores, en una elección, logran que un obrero zapatero ex consejero de la Comuna, sea electo diputado, unos días antes, 25.000 parisinos se habían congregado ante el muro de Pierre Lachaise para conmemorar el lugar de la última batalla.

A pesar de la derrota, la lección que dejó la comuna es irrepetible, demostraron que a pesar que en ningún momento tuvieron una dirección ni organización dirigiendo la lucha, cuando el pueblo se alza en armas contra un régimen corrupto o despótico, hace temblar todo el andamiaje de un sistema despiadado e injusto. No cabe duda que el camino debió se la destrucción de todo vestigio del poder burgués, de todo aparato estatal capitalista y recién después ponerse a la tarea de la creación de una nueva sociedad socialista.

Al cumplirse 139 años de aquellos hechos, rendimos desde estas páginas, nuestro homenaje a todos aquellos que se atrevieron a soñar con un mundo justo, con un mundo sin opresores ni oprimidos, y cada vez que alguien recuerde la Internacional, sabremos que esos hombres y mujeres que dejaron su vida para legarnos su mensaje, no han sido olvidados.

26 de marzo de 2010

TEMAS DE DISCUSION XV

Ser latinoamericano (parte final)

Cuando ‘Isabel’ se quedó con el poder en la Argentina, se vio, para sorpresa de todos, rodeada del apoyo de un histórico adversario del peronismo, como fue el radicalismo y su jefe en esos momentos Ricardo Balbín, además de otros partidos políticos, que rogaban que no se rompa el orden constitucional, aunque todos sabíamos que pensaban mas en que no caiga en manos de los partidos y organizaciones de izquierda que en un golpe de derecha. Todos estábamos concientes que era imposible que un país convulsionado internamente, con su economía en caída, con guerrillas urbanas y rurales peleando contra el sistema que ella defendía y con sus Fuerzas Armadas que ya estaban extrañando no tener en sus manos el poder, al que eran tan afectos, mas las pocas luces de esta mujer, eran el anuncio de su fracaso y según personas que vivieron de cerca cuando Perón conoció a Isabel, afirman que ella se ofreció para hacer la limpieza de la mansión que Perón usaba en su exilio de centro America, y que al poco tiempo de convivir con Perón, se dejó manipular por una personalidad obsesiva y enferma como la de José López Rega, que al fallecer Perón, la termina de someter incondicionalmente a los desvaríos de éste personaje nefasto para el país.

A la segunda semana de asumir, esta mujer tiene su primer problema con la guerrilla, es ajusticiado Arturo Mor Roig, al salir de un restaurante en la localidad de San Justo. Inmediatamente el gobierno acusa al E.R.P. de ser el ejecutor, luego de un tiempo se le adjudica a Montoneros el hecho, aunque entre las organizaciones de izquierda sabíamos que lo había realizado alguien que hoy es un periodista ‘estrella’ de un ‘gran diario argentino’, ya que él lo decía orgulloso a quien quisiera escucharlo en aquellos años.

A partir de ese momento se declara una guerra abierta. El E.R.P., que operaba en Tucumán, ataca el 17* regimiento de paracaidistas den Catamarca, para obtener 300 armas. Otra unidad de esa organización asalta la fábrica de explosivos de Villa María en Córdoba y se llevan mucho equipo militar.

El gobierno responde aprobando una ley de seguridad nacional y establece el estado de sitio. A su vez, desde el estado, las A.A.A. comienzan una matanza de dirigentes de izquierda, estudiantes, delegados de base de fábricas y varios intelectuales, el 31 de Julio matan 5 personas, entre ellas el diputado Rodolfo Ortega Peña, identificado codn el peronismo de base. En Septiembre, otros 7 asesinatos de la derecha conmueve al país, matan entre otros, al ex -gobernador de Córdoba Atilio Lopez, al ex – jefe de policía de la Provincia de Buenos Aires, Julio Troxler y a Silvio Frondizi , hermano del ex – presidente. Antes de fines del 74’ otros 20 asesinatos de la derecha sacude al país.

Asimismo, el estado intensificó el acoso a los gremios rebeldes, en ese tiempo René Salamanca debe dejar el gremio de los metalúrgicos de Córdoba, Agustín Tosco el de los obreros de Luz y Fuerza de Córdoba, Raimundo Ongaro el de los Gráficos en Buenos Aires y Julio Guillán el de telefónicos .

El asedio siguió hasta destituir a los gobernadores que habían sido elegidos democráticamente; Martinez Vaca de Mendoza, Copernic de Santa Cruz, Ragone en Salta y Mott en Catamarca.

Por su parte, la organización Montoneros sigue con los secuestros destinados a recuperar dinero por intermedio del rescate, así los dos hermanos Born , dueños de la mas grande cerealera del país, les rindió 60 millones de dólares. Luego es ajusticiado el jefe de la policía federal, el Comisario Villar, un torturador de trabajadores, y su sucesor, el Comisario Margaride escapó por poco al estallar una bomba en su coche. El E.R.P. siguió aumentando sus fuerzas en varios departamentos de Tucumán.

A fin de cambiar algunas cosas que le permitieran seguir adelante, Isabel destituye a Gerbard de su puesto en Economía y coloca a Alfredo Gómez Morales, el mismo que había tenido ese cargo en 1952.

La organización Montoneros, a fines del 74’ anuncia que pasa a la clandestinidad para “…continuar luchando contra el régimen…” , y lo hace tan desordenadamente que deja a toda su gente de ‘superficie’, desprevenidos y expuestos. A los pocos días la triple A se lanza a la caza de activistas que habían sido abandonados por la dirección. Hace unos meses atrás, averiguando sobre este hecho, un ex –militante Montonero, me decía que un día recibieron la orden de exilarse en algún país, pero muchos de ellos no tenían dinero ni para cambiar de barrio y sus dirigentes y el dinero de la organización ya estaban en Europa. Demás está decir que cientos de ellos fueron asesinados por los paramilitares de la triple A. en ese lapso.

A todo esto, López Rega se había hecho nombrar secretario privado de Isabel, conservando su puesto de Ministro de Bien Estar Social, y desde su nuevo puesto impulsa una de sus objetivos, entregarle la responsabilidad total a de las operaciones anti –guerrilleras del interior al ejército y esto entró en vigencia en febrero del 75’, éste proyecto fue apoyado por el almirante Massera cuando el ejército se negó a poner un hombre de esa fuerza al frente.

Esta negativa le costó el puesto al entonces jefe del Ejército, general Anaya y fue reemplaza por el general Numa Laplane. También por ese tiempo renuncia Gómez Morales al ministerio de Economía y López Rega coloca en ese puesto a un amigo suyo, Celestino Rodrigo. Este nuevo ministro, en una actitud absolutamente absurda tanto técnicamente como políticamente, devaluó la moneda al 50% respecto del dólar, dobló el precio de los combustibles y los servicios públicos y anunció drásticas restricciones presupuestarias, la liberación de los precios y restricciones en los acuerdos salariales que ya se habían firmado días atrás cuando Gómez Morales aún era ministro. Esto crea un hecho inédito en la historia del peronismo, la C.G.T., debe enfrentar al gobierno empujada por la presión de las bases y exige aumentos del 80% en promedio, el alejamiento de López Rega y la renuncia de Rodrigo. Esta posición de los sindicatos, reforzó la posición de la Cámara de Diputados que estaban cuestionando a López Rega, acusándolo de corrupción y lo acusaban de ser el jefe de la banda de asesinos conocida como triple A.

En un acto desesperado, Isabel solicita el apoyo del ejército para frenar lo que veía como un camino sin retorno, pero el general Numa Laplane se niega. Isabel se vio en la necesidad de ceder a la presión, aceptó acuerdos salariales, se deshizo de Rodrigo pero se negó a sacar a López Rega, a cambio de eso, le pidió la renuncia a su cargo de ministro y de secretario privado y le dio un puesto no definido en el exterior.

Isabel pide permiso para ausentarse de la presidencia alegando mala salud y la reemplaza Italo Luder, éste lleva a Antonio Cafiero a Economía para tratar de controlar la situación, pero sin suerte, los grupos guerrilleros ya estaban apoyando a las bases obreras y amenazaron con acciones armadas si se quitaban las mejoras salariales conseguidas. Al poco tiempo vuelve Isabel al gobierno y es indagada por el Congreso para que informe sobre evidentes desvíos de dinero público, ya tenía la mitad del bloque peronista enfrentado y la C.G.T., en lucha. Ella trata de negociar y ofrece adelantar las elecciones a octubre del 76’. En diciembre del 75’ el brigadier Capellini intenta un golpe de estado pero tuvo que abortarlo.

En agosto, los Montoneros lograron atacar el centro de las operaciones antisubversivas en Tucumán, hicieron estallar un avión Hércules cuando despegaba, a principios de agosto atacan el regimiento de infantería de Formosa, logran liberar a compañeros encarcelados y sacarlos en un Boing 737 que se lo apropian para fugar, Logran volar sobre 2 provincias antes de aterrizar. Los Montoneros que se habían reagrupado, declaran que “…con esta acción, nuestra Organización empieza a convertirse en un ejército regular…” .

El E.R.P. efectúa un importante ataque al arsenal de Monte Chingolo en diciembre del 75’.-

Los bloques de Diputados, habían sugerido que se nombre a Luder como interino hasta las elecciones, eran momentos en que la inflación llegaba al 300%. Cuando el diario ‘La Razón’ saca en la tapa un titulo con letras ‘catástrofe’ con la frase ‘CRISIS POLITICA’, todos sabíamos que el golpe era inevitable.

Cuando la noche del 23 de marzo del 76 Isabel Perón salía de la casa de gobierno hacia la quinta de Olivos, se acercó un oficial de la fuerza Aérea, la saludó y le informó que ya no era mas presidente. Una vez mas, la aventura de las salidas electoralistas burguesas demostraba su impotencia, y el costo que debió pagar el pueblo a partir de ese momento fue el mayor genocidio perpetrado en la historia de la Argentina.

17 de marzo de 2010

TEMAS DE DISCUSION XV

Ser latinoamericano (parte 12º)

El tercer gobierno de Perón, se caracterizó por el intento de conciliar las partes del capital y el trabajo, pero como veremos, no tuvo mucha suerte, ya que ambas partes estaban enfrentadas y al menos, una de ellas no tenía ninguna gana de aparecer como parte de esa conciliación. Perón cifró todas sus esperanzas en que, por un extremo, el del capital, lo tendría cubierto por la presencia de José Ver Gerbard como titular de la C.G.E. (Confederación General Económica), y por el otro, el del trabajo, lo tenía de José Ignacio Rucci en la C.G.T. cuya tarea era no entorpecer las gestiones para llegar a acuerdos salariales sin conflictos obreros ni fábricas paradas. Como ambas organizaciones era de su invención, todo hacía suponer que la tarea no iba a resultar tan arduas estando Perón como mediador. A éste proyecto lo llamó ‘Pacto Social’.

Ya en los primeros sondeos, la sociedad rural Argentina, no aceptó participar de acuerdo ni integrarse con la C.G.E., y por el otro, los trabajadores que no tenían ningún respeto por Rucci ni por los burócratas que lo rodeaban, se enfrentaron a éste planteo, apoyados por los grupos guerrilleros que se ofrecían a pelear junto a ellos por sus reivindicaciones y para combatir lo que entendían como un mal negocio para los trabajadores, ya que las cifras que se manejaban como salarios, no eran las que ellos entendían como justas. Para colmo de males, Perón había diseñado una nueva ley de Asociaciones Profesionales que les garantizaba a la burocracia sindical un poder mas amplio aún del que ya tenían; el lapso de duración de los mandatos de esos dirigentes fue duplicado, pasaron de 2 a 4 años, la posibilidad de intervenir sindicatos díscolos fue absoluta y hasta podían dejar sin efecto acuerdos realizados entre obreros y fábricas que no hubieran sido homologados por la C.G.T., lo que aceleró el distanciamiento entre el peronismo de base, como de dirigentes críticos como Obregón Cano de Córdoba y Raimundo Ongaro de los gráficos, que pasaron directamente a la oposición, sin contar a los miles de trabajadores que no estaban enrolados dentro del peronismo .

Perón, en ese tiempo, desempolvó su viejo discurso sobre la ‘Comunidad Organizada’ y la transformó en ‘Democracia Integrada’.

Alguna vez, charlando con un viejo dirigente peronista, la hice notar que ese pensamiento de Perón era ‘demasiado’ parecido al ‘Gran Acuerdo Nacional’ que proponía Onganía y que ellos lo tildaban de corporativista, y me dijo que probablemente sería así, pero –según su opinión- en este caso era ‘con el pueblo’ y no ‘contra el pueblo’.

Al finalizar el año 74’, el E.R.P. toma una decisión que ocuparía los titulares durante mucho tiempo, organizaría una vez mas la guerrilla rural y, una vez mas, la zona elegida era la Provincia de Tucumán, donde los sobreros de la caña de azúcar eran explotados hasta el agotamiento, y empiezan a plantear ataques contra blancos militares relevantes. La derecha también se organiza y realiza el atentado mas conmocionante del año, hace estallar el coche que transportaba al Senador Hipólito Solari Irigoyen (U.C.R.) y usan una sigla en el comunicado del ataque que inica una etapa siniestra en la Argentina; Alianza Anticomunista Argentina; mas conocida por sus siglas A.A.A.

Juan Carlos Dante Gullo, responsable de la regional I de la juventud peronista, manifestando

que quiere contribuir al plan de Perón, organiza a centenares de jóvenes para trabajar gratuitamente junto al ejército en socorro de los grandes inundaciones que asolaban a una parte del país, a lo que el general Carcagno llamó “la unidad del pueblo y el ejército” y que contó, además con el elogio de otro general Albano Harguindeguy.

Ante la popularidad que estaba tomando el general. Carcagno, Perón lo releva y nombre al general Leandro Anaya.

La embestida contra la izquierda ya era irreversible. Ante un comunicado de la juventud llamando a enfrentar a “los burócratas propensos a la defección” de la C.G.T., Perón declara que, “ahora la C.G.T. puede estar tranquila con la dirección que tiene, aunque algunos tontos digan que son burócratas”, y terminó diciendo que “conocía muy bien a esos dirigentes desde hacía treinta años”.

Cunado el E.R.P. lanzó un ataque contra el regimiento de caballería blindada de Azul y en un tiroteo muere el Teniente coronel Igarzabal y el Coronel Gay, Perón aprovecha la oportunidad y pide la renuncia del Gobernador de la Provincia de Buenos Aires Oscar Bidegain. Asume Victorio Calabró, un hombre incondicional ligado a los sindicatos y la C.g.T. que como primera medida de gobierno se dio a la tarea de ‘limpiar’ a la administración pública de ‘izquierdistas sospechosos’ y delegados de base. Perón avanza en sus medidas antiguerrilleras y declara que el E.R.P. dejó de ser una banda de delincuentes y ahora lo cataloga como una organización con dirección extranjera y objetivos extranjeros que ataca al estado y sus instituciones y que por lo tanto, convoca a las fuerzas armadas a tomar las riendas de la aniquilación y que combatirla será tarea de todos aquellos que quieren una patria libre, justa y soberana. Inmediatamente envía al congreso un proyecto de ley antisubversiva que era la misma que había eliminado Cámpora al asumir.

En un discurso, Perón se dirigió abiertamente contra las juventudes de su movimiento, asegurando que todos tenían la libertad de pensar como quisieran, lo inaceptable –aseguró- es decir que somos una cosa cuando posiblemente seamos otra. Los que quieran seguir luchando –siguió- estarán fuera de la ley, porque ya no hay lucha alguna en este país –enfatizó-, luego se preguntó “¿Qué hacen Uds. en el justicialismo?. Para terminar asegurando, Si yo fuera comunista iría al Partido Comunista.

A los tres días, Dardo Cabo, desde ‘El Descamisado’ le contestaba, declarando que cuando ¡luchábamos contra Lanusse, nadie nos dijo que no fuéramos del movimiento, ahora nadie tiene el derecho de echarnos”.

Al poco tiempo, algo insólito sucede en Córdoba, allí el jefe de policía, un coronel retiradod de nombre Navarro, se dio a la tarea de de expulsar al gobernador Obregón Cano y a su vice Atilio Lopez., mediante un golpe de estado policial (?), y cuando todos esperábamos que el gobierno nacional ordenase sofocar ese golpe, oponerse a ese acto de sedición y restituir a las legítimas autoridades el gobierno, Perón nombra un delegado federal como gobernador.

El 1 de Mayo, tanto la juventud peronista como los Montoneros marchan en decenas de miles a la Plaza de Mayo, era el momento que esperaban para preguntarle a Perón que estaba sucediendo con el gobierno que estaba ‘lleno de gorilas’, Perón les respondió agresivamente; “ Pese a esos estúpidos que gritan –gritó colérico- los sindicatos han actuado bien durante veintiún años y ahora estos imberbes pretenden tener mas mérito que quienes han trabajado durante veinte años”. Al seguir con su discurso y los gritos de la juventud no lo dejaba seguir porque querían definiciones, se deja llevar por la furia y les gritó idiotas útiles. En ese momento los jóvenes la dieron la espalda y se marcharon dejando la Plaza y un insultante vacío se noto en mas de la mitrad de la plaza de Mayo. Perón tronó; “Que cada uno vaya a su puesto de combate, pues si éstos réprobos no desisten, empezaremos nosotros”.

Al otro día, fueron cerrados el diario el Mundo, el Descamisado y Militancia.

El 10 de mayo, es asesinado el padre Carlos Mujica al salir de una iglesia en el barrio de Flores. Ese mismo mes, el general Anaya afirma que estaba dispuesto a poner sus fuerzas a disposición del gobierno en la guerra contra la subversión y al otro día en forma discreta se desplazan fuerzas de Gendarmería junto a la policía federal y el ejército hacia Tucumán.

El 1 de julio de 1974, Perón murió.

16 de marzo de 2010

TEMAS DE DISCUSION XV

Ser Latinoamericano (11º parte)

Hubo momentos de la historia contemporánea argentina, como la matanza de Ezeiza, que si bien merecen que cualquier aprendiz de escriba como el que Ud. está leyendo, se detenga y se explaye sobre ese hecho, hay tanta literatura sobre el tema y tantas miradas distintas que estoy convencido de que solo reiteraría lo que otros han escrito y lo han hecho seguramente mejor que yo, por lo que he decidido consignarlo y seguir adelante.

A la noche de ese 20 de junio, Perón habló por la cadena nacional, y si bien no era funcionario público y posiblemente era la primera vez que se habilitaba la cadena para alguien que no tuviera cargo alguno, a ninguno nos llamó la atención que eso ocurriera. Hablaba lentamente y si el recuerdo no me traiciona, su voz era mas ronca que la habitual. Dijo en esa oportunidad que si bien había que hacer una revolución, esa revolución debía ser en paz, y que aquellos que quisieran cambiar el rumbo del gobierno se habían equivocado de ruta, refiriéndose a los hechos violentos que se habían desarrollado a su llegada en Ezeiza.

A los 2 días, en el órgano de difusión ‘’El Descamisado’, Montoneros declara, tratando de establecer su posición, que no son ellos quienes quieren cambiar el credo peronista. No obstante, no se alejan del movimiento y los días subsiguientes marchaban en multitud hacia la casa de Gaspar Campos en Olivos, que la C.G.T. había comprado para que estableciera su residencia su líder. Allí Perón recibe a grupos de las juventudes que le llevan sus preocupaciones y se concentran en denunciar a grupos de derecha enquistados en el gobierno como responsables de las agresiones, y la derecha hace lo propio en el momento en que le toca el turno. Perón trata de darles a todos contestaciones que no lo comprometan con definiciones muy definitivas sobre el tema.

Antes de terminar junio, al menos una docena de raptos, seguidos de pedidos de rescates se llevan a cabo, y el E.R.P. en un acto que se tomó como un desafío al gobierno, en una conferencia de prensa, su líder Mario Roberto Santucho describe a Perón como viejo, incompetente y no revolucionario, y asegura que su organización continuará la lucha armada. Esa conferencia fue parcialmente trasmitida y comentada en dos canales de televisión e inmediatamente son multados por el estado, y luego se les hace saber a todos los medios de información que en adelante quedaba prohibido hablar en los medios del E.R.P.

La derecha seguía en su ofensiva, para no perder presencia y disputarle poder a otras organizaciones, de tal forma que grupos comando toman radios para leer comunicados declarando sus posturas y señalando como enemigos de la patria a los gobernadores de Buenos.Aires y Córdoba amenazando con su eliminación física si no renunciaban.

A los pocos días de la llegada de Perón, otro oficial de alto rango fue muerto por la guerrilla, se trataba del jefe de la armada, Alberto González Riesco, Perón es presionado por jefes militares y al ver que Cámpora no puede detener la guerrilla lo increpa delante de un grupo de gente e inmediatamente se empieza a hacer fuerte la idea de hacer renunciar a Cámpora, asegurando que únicamente Perón puede detener a ‘los violentos’ . Esta estrategia estaba apadrinada por López Rega y Gelbard y estaba siendo consensuada con los militares, que no cesaban de hacer conocer su enojo que no podía controlar a las agrupaciones rebeldes y disconformes.

A mediados del 73’, el periódico peronista conservador ‘Mayoría’ advierte que el país estaba sufriendo los efectos de un ‘vacío de poder’, un dirigente de la Provincia de Buenos Aires, Vittorio Calabró dijo; “…ahora que Perón está en la Argentina, solo él puede ser presidente…”, para apoyar esa afirmación y preparar el terreno para seguir con esa idea, se efectiviza la ley que le devuelve el título de teniente general a Perón y su derecho a uso del uniforme, cuyo decreto le había llevado Cámpora cuando aún estaba en España. Cuando los comandantes de las tres armas estuvieron de acuerdo con el traspaso del poder, Cámpora y Solano Lima renunciaron. El que seguía en el orden constitucional para hacerse cargo interinamente de la presidencia era el presidente de la Cámara de Diputados Díaz Bialet, pero por orden de Perón se lo envía a una gira por Europa no programada y para sorpresa de todos quedó a cargo de la presidencia de la Nación Raúl Lastiri, un oscuro e incapaz hombre que se había dedicado toda su vida a vender publicidad y que se lo conocía por ser el yerno de López Rega, lo que le había valido el privilegio de ser Diputado y ahora lo hacían presidente.

A los 7 días de su nombramiento, anunció formalmente el nuevo calendario electoral, elecciones el 23 de Septiembre y la entrega del bastón de mando y la banda presidencial el 12 de octubre. Lastiri estuvo 91 días en el poder, casi el doble que Cámpora.

La elección del vicepresidente del peronismo fue el tema mas discutido y delicado en la interna peronista, nadie ignoraba que Perón estaba viejo, que podía enfermarse o morirse sin terminar su mandato, y eso significaba que el cargo de vicepresidente era crucial y como todos habían acordado que ese cargo fuera elegido por el mismo Perón, el nombre que éste eligiera sería el determinante para saber a ciencia cierta cual era el plan y el rumbo que éste había pensado para su gobierno. Tanto la izquierda del movimiento como la derecha, se creían con la suficiente autoridad e historia para poner a alguno de sus hombres para ese puesto. La fecha para la proclamación de la fórmula era el 4 de agosto y la expectativa crecía o menguaba de acuerdo a los rumores que iban y venían y a las declaraciones que efectuaba Perón que alentaba o desalentaba a ambos bandos alternativamente, y nadie sabía como se expediría finalmente .

Cuando Perón anunció que la elegida era María Estela Martínez, su tercera esposa. La elección desencantó a todos por igual. “El Descamisado” órgano de difusión de la izquierda peronista se preguntaba ¿ Por que Isabel?, nombre por el que era conocida, ( que había sido su nombre de fantasía cuando trabajaba en clubs de Centro América), y Dardo Cabo, en el editorial de la revista trataba, sin mucho éxito, de interpretar esa decisión como el resultado de una supuesta presión que ejercían sobre Perón el ‘entorno’ que lo mantendría ‘aislado’ y que había un proyecto de unidad nacional que estaba en peligro. Aunque rescataba (o pretendía hacerlo) a Isabel como compañera de Perón en el exilio, no le adjudicaba los conocimientos ni los valores políticos que debía tener alguien como para afrontar tamaña responsabilidad.

Poco después, el 6 de Septiembre el E.R.P. asalta el comando de sanidad militar y se apodera de armamento. Allí cae herido de muerte el teniente coronel Duarte Ardoy, segundo jefe del regimiento, cuando intentó sorprender a los guerrilleros entrando con una patrulla por los fondos del regimiento y fue recibido por una lluvia de balazos, luego éstos son rodeados y vencidos.

Al llegar las elecciones, Perón gana con el 61,8 % y Balbín se adjudica el segundo puesto con el 24,4 % . Al día siguiente se firma un decreto declarando ilegal al E.R.P., no obstante el E.R.P. responde secuestrando al 2do. director del diario Clarín y obliga al diario a sacar un anuncio en la tapa atacando duramente a López Rega, a Gelbard y a Rucci, la derecha le responde incendiando un local del diario.

Al mediodía del 25 de septiembre, en el barrio de Flores, es muerto a balazos José I. Rucci al salir de un lugar secreto donde dormía de vez en cuando, -una vez mas me relevo sobre la necesidad de profundizar sobre este tema por la cantidad de estudios y bibliografía realizados sobre este hecho-.

En Chile, 15 días antes de este hacho, el gobierno de Salvador Allende, había sido arrasado por un golpe de estado comandado por Pinochet, financiado y programado por la C.I.A. y el departamento de estado de los Estados Unidos. Perón acusa a los “apresurados y los retardatarios” el haberlo provocado, sin mencionar nombres ni responsables.

Un día después de la muerte de Rucci, la derecha asesina a Enrique Grymberg, miembro de la Juventud Peronista. En su funeral, su cajón fue cubierto con las banderas de F.A.R. y de los Montoneros .

El E.R.P.-22, una de las organizaciones guerrilleras, sacó un comunicado negando la responsabilidad por la muerte de Rucci, un año mas tarde, Montoneros asume la responsabilidad y por publicar esa información, el diario ‘El Mundo’ fue cerrado por tres días y canal 9 fue multado, estallaron bombas en el diario ‘La Capital’ de Mar del Plata y Rosario, y el diario ‘El Norte’ De San Nicolás sufrió un ataque, una bomba estalló en el periódico ‘Militancia’ (del peronismo de base) , y finalmente el gobierno, en forma abrupta, canceló las concesiones a tres canales de televisión.

El 12 de octubre, Perón juró como presidente de la Argentina y como vice-presidente María Estela Martínez.

15 de marzo de 2010

TEMAS DE DISCUSION XV

Ser latinoamericano (10º parte)

El juego electoral había comenzado y nadie quería quedarse afuera, entre Perón y Lanusse habían monopolizado el escenario político con amenazas, declaraciones y juramentos tan bien hechos que logran el resultado buscado, para el pueblo se trataba de una pelea entre Perón y los militares, dejando a los demás partidos como simples espectadores, y para dejarlo mas claro, Perón enfatizó que la “lucha era entre el pueblo y las fuerzas armadas” y a las formaciones guerrilleras se los dijo en otro idioma, asegurando que “el enfrentamiento era entre la revolución y la contrarrevolución”.

Perón nombra a Galimberti en el consejo superior del partido y luego a Juan Manuel Abal Medina (hermano de Fernando, fundador de Montoneros) como secretario general del movimiento, como una forma de demostrarle a Lanusse que a él nadie le ponía condiciones y para seguir siendo tapa de todos los medios, con estas designaciones tan discutidas. También usó términos como “liberación o dependencia” para dirigirse a los empresarios y gente ‘bien pensante’, a los que palabras como ‘revolución’ o ‘pueblo’ les producía escozor e hizo público las “Bases mínimas para la Reconstrucción Nacional” que era casi un calco de la declaración de ‘La Hora del Pueblo’ que había consensuado con el radicalismo.

La fecha de presentación de listas para los comicios del 73’ se acercaba y Perón no volvía a la Argentina, el radicalismo se entusiasmaba con la idea de que el peronismo no encontrase un candidato potable sin Perón y la izquierda se había reunido en la “Alianza Popular Revolucionaria” tras la figura de Oscar Alende y mucho mas atrás, en los sondeos venía Manrique y Ezequiel Martínez (otro marino retirado). Perón había logrado que la identidad peronista persistiera en el tiempo como un artículo de fe, en ella todo el espectro se sentía representado, desde parte de la guerrilla, hasta los gremialistas corruptos y burócratas. Los viejos peronistas de la resistencia descontaban que con la sola presencia de Perón, al margen del resultado eleccionario, el pueblo saldría a las calles como en el 45’ exigiendo llevar a Perón al poder, en una patriada mucho mas numerosa que en aquella fecha, y a la que hasta le habían encontrado un nombre; “Argentinazo”. El 17 de octubre del 72’ tan esperado llega pero Perón no está en la Argentina, en su lugar, Cámpora se reúne con la junta de comandantes y establecen al fin el calendario político, el retorno de Perón se prevé para el 17 de noviembre por intermedio de un mensaje de Perón y a partir de allí todas las corrientes peronistas empiezan a organizarse para ir a Ezeiza a recibirlo. Al fin Perón vuelve el 17 de noviembre, en circunstancias que son muy conocidas, durante su estadía realiza reuniones con distintos partidos y vuelve a Madrid. Dese allí anuncia que el candidato del FREJULI sería Héctor Cámpora , seundado por Solano Lima, un viejo conservador.

Si bien Cámpora tampoco cumplía con los requisitos exigidos por los militares para ser candidato, ya que sus viajes al exterior lo dejarían sin posibilidades, ante la insinuación de Perón que podría cambiarlo por Julián Licastro, un teniente d1* del ejército dado de baja por declarar su afiliación peronista. O por Galimberti, que para los militares representaba la ultra izquierda, resolvieron aceptarlo a Cámpora.

Aunque por arriba los dirigentes políticos encontraban coincidencias, por abajo, parte de la militancia no creía en esa ‘puesta en escena’ de marchas y contramarchas y no hubo una semana sin que los ataques de la guerrilla sacudieran las tapas de los diarios. Los secuestros se multiplicaban en una escalada tanto de la importancia de las victimas como de los montos de los pagos de rescate, en la lista de raptos estuvieron el presidente de Philips de Argentina, el gerente de la Anglo, un lato ejecutivo de la ITT entre otros.

Los ataques con bombas también continuaban, el hotel Sheraton, un Club de Campo, las fuerzas armadas perdieron un contraalmirante y un oficial de inteligencia del ejército. El E.R.P. perdió a Ramón R. Jiménez y las F.A.R. sufrieron un revés al intentar atacar un tren militar.

Perón, entretanto, se reúne con un delegado del Viet Cong en Perís y la izquierda peronista recibe el hecho como una toma de posición del ‘viejo’, pero casi inmediatamente felicita públicamente a los sindicalistas mas repudiados por la izquierda, y la derecha lo asume como otra ‘toma de posición’. El dinero llega a raudales a las arcas del FREJULI para la campaña, José Ber Gelbard, como líder de la Cámara de empresarios realiza reuniones con éstos, asegurándoles que solo Perón podría frenar a la izquierda y con éste solo argumento consigue que los bolsillos, tan proclives a cerrarse, se abran generosamente a los aportes a la campaña, tal vez pensando que de esa forma estaban pagando un seguro contra un secuestro.

Al momento de elaborar las listas, todos fueron recompensados, la izquierda recibió la mayoría de candidaturas en el congreso y en las gobernaciones y a su vez, la derecha fue llamada a formar parte del ‘entorno’ íntimo de Perón, que lo integraban José Ver Gelbard, José Ignacio Rucci y José Lopez Rega.

El resultado de la elección fue del 49,5 para el FREJULI y lo seguia el radicalismo de Balbín con el 21,3, lo que obligaba a una segunda vuelta técnicamente, pero al final Balbín renuncia a su candidatura.

A solo 4 días de pasadas las elecciones, es muerto en un tiroteo un jefe Montonero, Mariano Pujada y en adelante nunca pasaron mas de 2 días sin noticias de algún golpe guerrillero. ÇA principios de abril es muerto el coronel Iribarren, jefe de inteligencia del 3* cuerpo de ejército en Córdoba. Mas visiblemente restablecidas las F.A.R. a fines de marzo ocuparon brevemente la ciudad cordobesa de Villa Alende, en abril asaltan los tribunales de San Isidro, llevándose armas y documentos y a fines de abril montaron la ocupación de tres estaciones de ferrocarril. El E.R.P. se apodera de 2 comisarías en la Isla Maciel, pusieron una bomba en un cuartel de la marina y raptan al contra almirante Alemán, un ex jefe de inteligencia de la marina. El 30 de marzo el contra almirante Hermes Quijada, otro oficial de inteligencia es abatido en un tiroteo.

Desde Madrid, Galimberti, luego de una reunión con Perón dijo en una conferencia d prensa, que el nuevo gobierno investigaría lo hecho por las fuerzas armadas y que además crearía las milicias populares, lo que desató la furia de Perón y quedó separado de su cargo en la movimiento peronista.

La muerte de Quijada fue un golpe muy duro para el gobierno de Lanusse, éste declara el estado de emergencia en cinco provincias y una búsqueda rastrillo por todo el país se desata, sin lograr resultados, al final decide levantar el estado de sitio que regía desde el Cordobazo . el E.R.P. le contestó ese mismo día matando a Dirk Kloosterman, dirigente del sindicato de mecánicos de automóviles.

En menos de 65 días, fueron secuestrados y pagaron rescate; el gerente general de Kodak Argentina, el director de Nobleza – Picardo, un alto ejecutivo de Ford Motors, entre otros.

Finalmente, el día de la asunción llegó y en la plaza de Mayo se encontraban las banderas de la F.A.R. y Montoneros dando la bienvenida al nuevo gobierno del Dr. Cámpora.. Al resto de la militancia no la convencía nombramientos como el de Ber Gelbard en economía ya que se lo reconocía como un dirigente de los Empresarios y el del general Calcagno como jefe del ejército, ya que este había sido quien dirigió la represión durante el Cordobazo. Y tantas designaciones que asombraban y preocupaban a la gente que había luchado contra la dictadura en busca de un gobierno popular.

En su discurso, al asumir, Cámpora habló de una forma que la izquierda no esperaba, la palabra ‘concertación’, que inevitablemente conducía a entenderla como ‘conciliación de clases’ entre la clase obrera y el capital estuvo siempre presente en el discurso, Perón quería dejar en claro que el plan económico que le había preparado José Ver Gelbard era lo que él tenía en mente y no el que esperaba el ala izquierda de su partido. El ‘trasvasamiento generacional’ no significaba aceptar las medidas radicales que ellos querían.

A medida que avanzaba el discurso en el Congreso, columnas de jóvenes empezaban a organizarse y marchaban hacia las prisiones para liberar a los presos políticos. Cámpora, como primera medida de gobierno firmó la amnistía a los presos políticos y la pasó a diputados, donde fue aceptada a libro cerrado y sin discusión. Junto con la amnistía se disolvían 3 organismos de represión que habían establecido los militares. También se disolvió la poderosa D.I.P.A. (departamento de investigaciones policiales de actividades antidemocráticas) y se ordenó la destrucción del archivo de ‘sospechosos subversivos’, pero al tiempo se supo que antes de destruirlo se habían duplicado esos archivos.

También se avanzaba en la depuración de organismos del estado con las tomas, por parte de los empleados y obreros con la destitución de sus directores por parte de asambleas populares que se realizaban en las plantas, donde mas de una terminaba sacando a los empujones a los funcionarios acusados de reprimir huelgas y manifestaciones.

La derecha también estaba activa, en esa carrera para ver quien se quedaba como factor de poder en el nuevo gobierno, desde el ministerio de bienestar social que dirigía López Rega, se nombra como ‘subsecretario de deportes’ al coronel Osinde, un ex militar sin escrúpulos, con orden de combatir a la militancia , a tal efecto le ponen a su disposición un presupuesto que le permitió formar un pequeño ejército bien armado y organizado para reprimir con el respaldo del estado. Posteriormente, esta organización se convertirá en la funesta ‘triple A’ (Alianza Anticomunista Argentina), que operaba al margen de la ley y con el visto bueno del poder, manejándose desde el ministerio de bienestar social, sembrando el terror en ciudades y barrios y asesinando dirigentes y militantes populares. Todo la represión popular fue confiada a otro personaje siniestro; Ciro Ahumada, un ex capitán del ejército que nombrado como responsable de la lucha contra el tráfico de drogas, se aseguraba el acceso a fondos casi sin límites y que lo habilitaba para recibir de Estados Unidos, dinero y asesores especializados en combatir a la guerrilla, y fue el encargado, desde sus oficinas en la empresa del estado Y.P.F., reclutar a ex oficiales del ejército a los que los militantes populares llamábamos los ‘argelinos’, ya que su jefe aseguraba, aunque nunca lo pudo comprobar, que había aprendido sobre guerrilla con Ben Bella en Argelia.

Para esa época, las F.A.R. y Montoneros realizan una conferencia de prensa y anuncian que han abandonado la lucha armada y que están dispuestos a defender el –gobierno del pueblo-, en cambio el E.R.P. que también realiza una conferencia de prensa el mismo día, en la voz de su líder Roberto Santucho, proclama que la lucha armada continuaría hasta la conquista del poder popular.

El presidente Cámpora, viaja a Madrid a tramitar la vuelta de Perón y a llevarle el decreto de restitución de su rango militar –teniente general- con el derecho a usar uniforme.

Inmediatamente se empezó a organizar la vuelta de Perón, corriendo muchos rumores de la preocupación de Perón por no poder, Cámpora, controlar la violencia popular. Juan M. Abal Medina saca un comunicado exigiendo que deben cesar de inmediato las tomas de los ministerios y organismos nacionales y privados, por parte de los grupos militantes.

Cuando se establece el 20 de junio como fecha para el retorno de Perón, el gobierno comisionó al ex militar Osinde para que haga cargo del control del acto de bienvenida, ya que el enfrentamiento entre la izquierda y la derecha del peronismo se preveía como inevitable en los bosques de Ezeiza. Osinde forma a todos las fuerzas que tiene a mano, desde guardaespaldas de sindicalistas y de ministros, ex policías y represores armados con armas pesadas y se preparan para el enfrentamiento.

Ya el 19 de junio la gente empezó a acampar a la espera del avión que traería a Perón y todo su entorno, al llegar el 20 al mediodía, una enorme columna identificada como Montoneros se abre paso entre los concurrentes con el firme propósito de establecerse al lado del escenario, al rato, Osinde, desde arriba del escenario, se da cuenta que no la va a poder hacer retornar . A las 16,30, el coronel Osinde y el capitan Ciro Ahumada, colocados desde puntos estratégicos en los bosques de la zona, dan la orden de ametrallar a la multitud. La matanza de Ezeiza empezaba…

10 de marzo de 2010

TEMAS DE DISCUSION XV


Ser Latinoamericano
(9º parte)

Cuando Lanusse se apodera de la presidencia, por un golpe de estado a Illia, estaba convencido de que él representaba la Patria, y pretendió transformarse en conductor, aglutinador de multitudes, que por supuesto, no consiguió nunca. Para tratar de convencer al pueblo de su ‘amplitud’ ofrece el cargo de ministro del interior a un viejo dirigente del radicalismo, pensando que de esa forma seducía un amplio espectro de electores, al menos radicales. Arturo Mor Roig, que tenía 35 años de afiliado a su partido y había sido presidente de la Cámara de Diputados durante el gobierno de Illia, y justo del gobierno que Lanusse había derribado, pero parece que poco le importó a este hombre que fue expulsado del partido al aceptar, y que al asumir, aseguró que no usaría el puesto como trampolín para su carrera a la presidencia, cosa que todos sabíamos porque era español y la constitución no lo permitía. Además Lanusse trae también a Manrique, un marino retirado que lo había acompañado en cuanta aventura golpista había pergeñado. Ya con el gabinete completo, Lanusse llama a un ‘Gran Acuerdo Nacional’ que fue presentado con mucha publicidad, pero del que poco se sabía, ya que él nunca lo aclaró, y solo daba pautas de lo que significaba un proyecto tan ambicioso, y lo poco que se sabía era que estaría (en potencial) dispuesto a llamar a elecciones pero que no permitiría que eso sirviera para dar un ‘salto al vacío’, del que, por supuesto, tampoco aclaró los alcances ni el significado de ese ‘salto’.

A los diez días de asumir, deroga el decreto que disolvía los partidos políticos y a los 3 meses presenta la nueva ley de los partidos políticos, donde se exige una cantidad mínima de afiliados para su reconocimiento como tal, en un claro intento de llegar al régimen del bipartidismo al estilo norteamericano. A partir de allí se forman dos agrupaciones, ‘La Hora de los Pueblos’ que lleva el nombre de una de los primeros escritos de Perón en el exilio y está formada con parte del peronismo, el radicalismo y partidos menores, y el llamado ‘Encuentro Nacional de los Argentinos’, que reunía a la izquierda peronista, al comunismo y otros partidos. El 11 de noviembre del 71’ en la ciudad de Rosario, se realiza la Asamblea constituyente del ‘Encuentro…’ y ante un estadio colmado, hablan Bustos Fierro por el peronismo de izquierda, Agustín Tosco como independiente y dirigente del ‘Cordobazo’ y Alberto Pichininni dirigente metalúrgico de Rosario y dirigente del ‘Rosariazo’ , entre otros. Todos coincidieron en que no era aceptable un simple llamado a elecciones con presos políticos y proscripciones.

Lanusse buscaba afanosamente que los partidos le presentaran un candidato a la presidencia que sea aceptado por los militares, y como si eso fuera poco, exigía además que los militares formen parte de ese gobierno en puestos claves del poder y además que los partidos se comprometieran a no amnistiar a los presos políticos que ellos habían encarcelado. Todo esto no significaba otra cosa que formar un gobierno ‘civil’ pero manejado por los militares. Por supuesto ese ‘gran acuerdo…’ no fue aceptado por nadie en esas condiciones y las organizaciones armadas se lo hicieron saber rápidamente.

Lanusse, buscando aliados poderosos que no encontraba, dio a entender en un reportaje al New York Time que ‘aceptaría todo aporte para salvar al nación’, que muchos entendieron como un mensaje a Perón, para reforzar esto, hizo dejar sin efecto varios juicios que pendían sobre Perón a fin de demostrar que no caería preso si volviera a la Argentina, aunque el objetivo era que Perón se autoexcluyera de unas elecciones que aún no tenían fecha. Como Perón no confirmaba ni desmentía nada siguiendo su vieja táctica de ‘péndulo’, Lanusse en un intento desesperado ofrece a Gómez Morales primero y a Antonio Cafiero después, integrar el gabinete, éstos consultan a Perón y éste les dice que no acepten . el gobierno vuelve a intentar un acercamiento con Perón y le devuelve el cadáver de Eva Perón, que había estado enterrado en Italia con un nombre supuesto luego de pasar por varios escondites, buscando como él mismo lo dice “unir a los adversarios para combatir al enemigo” que por supuesto era la guerrilla armada, pero sigue sin tener suerte. Los Guerrilleros de la F.A.R. atacan un camión militar y en el tiroteo cae el teniente Asua. Diecisiete días mas tarde el sociólogo Juan P. Maestre y su mujer Mirta Misetích fueron secuestrados por los hombres armados, el cuerpo sin vida de Maestre aparece al otro día, el de su mujer no apareció nunca mas. Lanusse termina por reconocer que fue una operación del ejército ya que –asegura- eran participes de la muerte del teniente Asua y asegura que en el velatorio de Maestre, el mayor retirado Alberte había reconocido la participación en ese hecho de Maestre.

Al las pocos semanas, el gobierno saca una ley “antisubversiva”, con penas durísimas para todos aquellos que se levanten contra el gobierno. Algunos líderes de las organizaciones armadas son encarcelados como Roberto Quieto de las F.A.R. y Luis Pujals del E.R.P., luego se sucedieron enfrentamientos en Ferreyra (Córdoba) y otros lugares del país.

No había duda que la guerrilla llevaba la delantera en las acciones militares, creciendo en fuera y capacidad operativa, basada en la experiencia que adquirían y el dinero que obtenían lo que les permitía contar con suministros que al principio les escaseaban. El E.R.P. llegó a realizar dos conferencias de prensa a metros de la fuerza de seguridad. En junio dos evasiones en Córdoba y Buenos Aires liberan a 10 mujeres guerrilleras. En septiembre 14 guerrilleros lograron la libertad de la prisión de Villa Urquiza (Tucumán) y varios pueblos fueron ‘copados’ (ocupaciones breves).

Pero no eran solamente las organizaciones armadas las que tenían en jaque a Lanusse, Onganía, el dictador depuesto, sacó un comunicado diciendo que “…horas oscuras se pueden preveer en un futuro cercano, que nos obligarán a asumir mayores responsabilidades para salvaguardar la Nación y sus fuerzas armadas…”. A las pocas semanas, otro general se subleva, por supuesto en el nombre de la ‘Patria’ y se autoproclama como ‘Líder de la Revolución Argentina’, era el general Labanca, pero con tan poca suerte que sus pares no lo siguieron como un ‘líder’ en la intentona y su golpe abortó al momento de iniciar.

A los pocos meses, otros militares le quieren birlar el poder a Lanusse y logran levantar 2 regimientos, uno en la localidad de Azul y el otro en Olavarría, pero igualmente fueron sofocados el mismo día, demostrando una vez mas que la casta militar no estaba unida como ellos proclamaban y que no servían ni para enfrentarse entre ellos mismos. Lanusse denunció la tentativa como una conjura para que el pueblo no llegue a las elecciones e inmediatamente dio el calendario electoral, que fue publicado en octubre del 72’, fijando el acto eleccionario para el 25 de marzo del 73’ y para el 25 de mayo del mismo año la asunción del partido que resultara ganador , en un desesperado intento de detener las acciones guerrilleras, ya que ahora además la C.G.T. le realizaba un paro general para luego ir a entablar negociaciones en una actitud mas dura. Luego fueron José I. Rucci por la C.G.T y Rogelio Coria por las 62 organizaciones peronistas a dialogar con el gobierno dictatorial, ya que ambos sentían a las organizaciones guerrilleras como un enemigo en común.

Perón, posiblemente para presionarlo, despide a Daniel Paladino, su delegado personal, cuando se entera que había tenía contactos con el gobierno y nombró a Héctor Cámpora que era respetado por la militancia y su subordinación a Perón iba mas allá de toda sospecha, y para aplicar mas presión a Lanusse, Perón empezó a llamar a la guerrilla ‘organizaciones especiales’, como una forma solapada de darle su apoyo sin mencionarlo, al menos así lo tomaron los grupos peronistas.

Asimismo, Perón llamó a los partidos políticos a unirse al peronismo en lo que se llamó FRECILINA (Frente Cívico de Liberación Nacional), como forma de enfrentar al ‘Gran Acuerdo…’ de Lanusse.

Mientras los políticos y militares estaban en su juego, la juventud no se detenía, el E.R.P. en un fin de semana toma del Banco Nacional de Desarrollo 400 millones de pesos, y luego efectúa el secuestro mas publicitado, el de Oberdan Salustro, gerente de Fiat Concord de Argentina, el que como no era un militar acusado de asesinatos ni tortura a compañeros, no se lo condenó a muerte, solo exigieron un rescate muy importante que incluía entregar ambulancias a varias villas de emergencia, dinero y víveres. 1 Mes después al ingresar la policía luego de un intenso tiroteo en una casa que había sido denunciada, encuentra a Salustro muerto. Años después, uno de los combatientes que estuvieron presentes, me contó que Salustro, que había estado en la guerra mundial en Italia, imaginó que podía escapar y cuando ingresó una guerrillera a llevarle la comida el se abalanzó sobre ella, le quitó el revolver y le pegó un tiro, pero al querer salir corriendo los demás guerrilleros que estaban en las habitaciones delanteras lo ven fugarse y lo matan. Esos fueron los tiros que escuchó una vecina y por eso llamó a la policía, lo que desencadenó la tragedia. A los pocos días, es muerto el general. Juan C. Sánchez en Rosario, esos dos hechos conmocionaron a toda la población y a partir de ese momento se intensificó la búsqueda de militantes guerrilleros cambiando la técnica de buscarlos, en vez de mirar los documentos y las fotos para reconocerlos, se empezó a buscar los movimientos bancarios de gente que supuestamente no podría manejar grandes montos, se visitaba escribanías para saber que compras de inmuebles se hacían y con que fondos, para saber donde escondían el dinero las organizaciones y una cantidad de combatientes y líderes del E.R.P. y de las F.A.R. fueron encarcelados.

Faltando 5 días para la fecha límite de presentación de listas para los comicios, una fuga masiva desde el penal de Rawson conmueve una vez mas al país, 25 de los mas destacados líderes del movimientos guerrillero escapan y recorren 36 Km. Hasta el aeropuerto de Trelew, un reactor comercial, secuestrado por sus compañeros, aterrizó para recoger a 6 de ellos, incluidos Mario Roberto Santucho del E.R.P. y Roberto Quieto de las F.A.R., el resto fue recapturado al desviarse el avión que debían abordar y fueron llevados a la base comandante Irizar, no lejos del aeropuerto y 5 días después, el horror de la noticia de que todos menos 3 habían sido asesinados por personal naval que argumentaron que se trató de otro intento de fuga y se vieron en la obligación de ametrallar a los presos, el suceso sería llamado en adelante “La Masacre de Trelew”.

La fecha límite para la presentación de candidatos había pasado y Perón no había vuelto a la Argentina, Lanusse tampoco se había presentado como tenía pensado anteriormente. El escenario estaba preparado para el acto final y nadie sabía como terminaría.

8 de marzo de 2010

TEMAS DE DISCUSIÓN XV

Ser Latinoamericano (8º parte)

Cuando en 1966, los militares una vez mas nos roban el gobierno, el país vio como sacaban de la Casa Rosada a un hombre con estudios universitarios, que había pasado su vida atendiendo en su consultorio gente humilde en su provincia, que había leído a Kramer (aquel filósofo alemán del siglo XIX que le dio fundamento filosófico a la social democracia) y que, equivocado en sus concepciones, pero honesto en su proceder, estaba lidiando con las grandes corporaciones. Y todo esto para poner a un militar cuyas únicas lecturas conocidas eran el código militar y los fascículos que le daban en los cursos de catolicismo al que era tan adepto. Ese día sentimos que el costo de tener un militar sin conocimiento ni compromiso nacional al frente de las decisiones importantes para el país, sería muy alto y que, otra vez, ese costo lo deberíamos pagar todos (menos ellos), salvo q ue saliéramos a enfrentarlo…

Al jurar como ‘presidente’ (?), Onganía, se encontraban en el salón de actos una serie de dirigentes sindicales encabezados por Augusto Vandor en calidad de ‘invitados especiales’, que el pueblo interpretó como lo que realmente era, un contubernio entre burócratas sindicales y golpistas profesionales para asegurarse mutuamente poder, dinero e impunidad. Todo esto respondía a un proyecto del pentágono norteamericano para la represión obrera en América Latina, y lo hacían levantando la idea que la Argentina no estaba madura para la democracia y que primero había que construir realmente un estado, de crear una sociedad ordenada y eficiente para después, y solo después, darse el lujo de permitirse un gobierno democrático, que no era otra cosa que el concepto liberal de hacernos creer que somos incapaces y estúpidos y que solo ellos pueden, de puro solidarios que son, ayudarnos a alcanzar la mayoría de edad como para autogobernarnos, sabiendo de antemano que, por una parte, ellos son exactamente lo que nosotros NO queremos ser, porque no nacimos para sojuzgar pueblos ni asesinar trabajadores para enriquecernos, sin olvidarnos que el secreto de su ‘exitosa’ economía se basa en los millones de dólares que sacan de nuestros pueblos ya que sin ellos no podrían tener ni la tecnología ni las armas.

Perón, en un reportaje que le hizo Tomás E. Martínez para la revista ‘confirmado’, 1 día antes del derrocamiento de Illia, manifiesta que considera a Onganía como un buen soldado, que era un patriota, bien intencionado y honesto, no conforme con eso agregó “…llegó el momento en que los argentinos deben ponerse de acuerdo, si no, habrá llegado el momento de tomar las armas y pelear. El camino de la unidad es cada vez mas difícil. El camino de las armas cada vez mas fácil…”.

A poco de asumir Onganía, se da a conocer el acta del “Estatuto de la Revolución Argentina”, donde se disolvía el Congreso, el Poder Judicial, los partidos políticos y hasta la Procuración General de la Nación. La llamada Junta Revolucionaria también se disolvió y proclamaron, “Las fuerzas armadas no gobiernan ni co-gobiernan”. (aunque nadie les creyó).

Onganía, nombra a Jorge Salimei como ministro de economía, éste hombre había salido del Instituto de Economía de Mercado que dirigía Alsoragay. Al tiempo, el gobierno declara, muy suelto de cuerpo que “la revolución argentina no tiene plazos y que podría llegar a durar una década” .

Tiempo después, entusiasmados por lo que ellos creían un éxito de gestión, deciden avanzar sobre las libertades y se proponen terminar con el “semillero de sediciosos “ y deciden que la autonomía de las Universidades es peligrosa para el país y es anulada por decreto. La noche en que los organismos represivos ingresan a las Facultades se conoce como “La Noche de los Bastones Largos”, que traería, con el éxodo del plantel de profesores, el empobrecimiento intelectual de las cátedras, y el ostracismo con que la comunidad académica internacional castigó a la Argentina.

El tema del petróleo era crucial para Onganía, su decisión de entregar el patrimonio nacional a las grandes petroleras internacionales estaba en su agenda desde el primer día de gobierno, y dio vuelta la política de Illia, volviendo al planteo de Frondizi. Desde Madrid Perón dio por terminado su apoyo y describió a Onganía como “un reaccionario y un gorila” .(…el pueblo ya lo sabía…)

Algunos jefes del ejército, de esos que habían declarado que ‘no gobernaban ni co-gobernaban’ empiezan a cuestionar al gobierno. Onganía, como acto de afirmación de autoridad pasa a retiro al general Pistarini como comandante en jefe del ejército y nombra al general Julio Alsogaray , pero finalmente tiene que negociar y pone de ministro de economía a Adalbert Krieger Vasena, era el fin del año 67’.

A los pocos meses, la C.G.T., ante la presión de las bases, lanza un documento condenatorio, diciendo que “los intereses populares y nacionales se hallan en la vereda de enfrente del gobierno militar”, declaración tan imprecisa que no representaba el estado de ánimo de las bases y solo recibieron el desprecio de los trabajadores que estaban esperando un verdadero plan de lucha para enfrentar la dictadura.

Para esa época, el Ché Guevara, mediante una carta a la Tricontinental de la Habana predecía,”…nuevos brotes de guerra surgirán en estos y otros países americanos…”.

A mediados del 68’ Onganía dio signos de que las fuerzas armadas lo estaban intimando a corregir el rumbo, a “profundizar la revolución”, todo hacía preveer que si tiempo se acotaba.

Los gremios se llamaron a un “Congreso de Normalización” y allí se eligió una nueva dirección del movimiento obrero, que encabezaba Raimundo Ongaro del sindicato de gráficos. La facción que respondía a Vandor decide ignorar el Congreso y una vez mas se divide la C.G.T. en “de los Argentinos”, liderada por Ongaro y la C.G.T.-Azopardo liderada por Vandor.

En mayo del 68’ se produce en París la rebelión conocida como “El Mayo Francés”, mas tarde Perón diría “…todo comenzó en Mayo del 68’ en París…” para rematar con “…Yo estuve ahí en las barricadas…yo lo ví”.

El 23 de agosto del 68’ ante otro intento de ejercer control sobre las decisiones del gobierno, por parte de los comandantes en jefe, Onganía decide el relevo de éstos y nombra al general Lanusse en el ejército, al almirante Gnavi en marina y al brigadier Martínez Zubiría en aeronáutica. Un mes mas tarde le informan a Onganía que las fuerzas de seguridad habían descubierto y dispersado a un grupo peronista conducido por Envar El Kadre, que intentaban crear un foco de guerrilla rural en Taco Ralo, provincia de Tucumán, ese fue el inicio de un nuevo impulso de grupos que enfrentaban a la dictadura y en una cronología rápida e incompleta podríamos citar como fecha de inicio el mes de abril, cuando un grupo armado atacó un puesto de guardia de Campo de Mayo. El 12 de abril otro ataque guerrillero en puesto de guardia en aeropuerto, el 15 de abril, ataque al arsenal de Buenos Aires y se llevan un camión codn armas de calibre ligero. 16 de abril, un comando ataca un puesto en la base naval de Mar del Plata. 18 de abril en un ataque a un campo militar en Villa María (Córdoba), se llevan 12 rifles. 22 de abril se informa de ataques guerrilleros a puesto militar de Magdalena. En Salta y otras partes del país. El 23 de abril, Carlos Caride y Aida R. Filipini son capturados en el centro de Buenos Aires. El 4 de mayo se descubre una célula guerrillera en Tucumán.

Creo que viene al caso contar que, hace bastantes años, en algún lugar de esta generosa Latinoamérica, conversando con un guerrillero que había sido reclutado por el Che, me contó que durante el 64’ y el 67’, mas de 200 compañeros fueron enviados a Cuba a recibir cursos conocidos como ‘Peti’. El Che que estaba en Bolivia, luego de volver del Congo, en algún momento pasó por la Habana y seleccionó a 50 de estos guerrilleros pensando en una segunda etapa en Bolivia. Estos jóvenes, se organizaron y formaron columnas en Perú, otra en Brasil con Marighela y otra que se conocía con el nombre de Gelman (no por el poeta, sino por Alfredo Gelman el responsable que se contactaba con el Che). Ya preparadas las columnas, estaban esperando las órdenes del Comandante diseminados por Salta, Tucumán, Córdoba y Buenos Aires. Asimismo, otro grupo reclutado y dirigido por Bustos, con gente de ‘Pancho’ Arigó y Oscar del Barco también estaban a la espera.

Los grupos nunca llegaron a ser convocados por el Che, y a su muerte, deciden transformarse en la F.A.R. (Fuerzas Armadas Revolucionarias) y es el primero en realizar acciones bajo la dirección de Osatinsky, Kurlak, Olmedo, Jag y Marrero Díaz.

Según el análisis que me hacía este compañero, era probable que a la URSS ya no le interesara que el Che recibiera ese contingente de guerrilleros y que Alfredo Gelman ya fuera un agente soviético, porque a partir del distanciamiento del Che con la URSS, Gelman desaparece con los 150.000 dólares que le habían sido confiados parta la logística y nunca volvió a la Argentina y hablando con otros ex - compañeros hace poco, me enteré que hoy probablemente viva en Italia.

Estos grupos estaban reunidos en lo que se llamó “Ejército de Liberación Nacional” y lo componían, además de la F.A.R., el P.R.T., el P.C.R., la F.A.L.., estas organizaciones atacaban sorpresivamente, obtenían un éxito basado en la sorpresa y la organización y se retiraban en orden y en base a un plan trazado, lo que hacía muy difícil su represión. El gobierno militar reacciona y al no poder enfrentar con los manuales de guerra que habían aprendido, son entrenados por grupos parapolicilales franceses con técnicas probadas en Argelia y por la escuela de las Américas, un instituto para militares que se realiza en Centro América y es dictado por especialistas del pentágono norteamericano en guerra antisubversiva.

Entre las primeras decisiones de Onganía las facultades de humanidades eran su obsesión, la represión se hace sentir y los estudiantes no se quedan de brazos cruzados, salen a resistir y se enfrentan al gobierno que no duda en calificarlas de “..agentes de la antipatria y el comunismo”.

En la provincia de Corrientes los estatales salen a la calle y la policía trata de dispersarlos, dispara sus armas y cae muerto el estudiante Juan C. Cabral, al otro día su funeral fue multitudinario. En Rosario, una manifestación de protesta es reprimida por la policía y matan de un balazo al estudiante Ramón Bello. En Córdoba, las autoridades cierran la facultad. En Buenos Aires son heridas 20 personas y arrestadas 160 en otras manifestaciones. En todo el país las marchas y repudio al gobierno se suceden. Para no tener que enfrentar al pueblo, se decide por primera vez en la historia Argentina, suspender todas las festividades oficiales preparadas para el 25 de Mayo, en un vano intento de frenar a los trabajadores que salían a pelear en cada provincia, pero no pudieron, cuando el 29 de Mayo se preparaban para celebrar el día del ejército, Onganía y Lanusse se enteran que por las calles de Córdoba miles de trabajadores empezaban a marchar rumbo al centro de la Ciudad, con una policía desbordada, se convoca al ejército, que ese día estaba preparado con ropa para desfilar y no para reprimir, así es que los hacen cambiar de ropa y armarse para detener al pueblo pero ya era tarde, todo se les fue de las manos. El Cordobazo ya era imparable y los días de Onganía estaban contados.

A los pocos días, llega a la Argentina Nelson Rockefeller y a modo de ‘bienvenida popular’, los trabajadores incendiamos 15 supermercados de la cadena Minimax.

A fines de junio, es muerto un sindicalista conocido como un burócrata y traidor de su gremio (la U.O.M.) y la clase obrera, se trataba de Augusto T. Vandor, que fue acribillado en la sede de su gremio. El gobierno, una vez mas tomado de sorpresa, declara el estado de sitio y encarcela a 300 activistas acusándolos de sospechosos, no contento con eso, encarcela también a los abogados que se apersonaban a los juzgados presentando ‘habeas corpus’. También es encarcelado Raimundo Ongaro e infinidad de dirigentes.

Lanusse, en representación de las fuerzas armadas, le entrega un informe a Onganía, donde manifiesta que el gobierno estaba sufriendo un grado de deterioro que no se condecía con al espíritu de la ‘Revolución Argentina’ y pide que “los militares no sigan siendo meros espectadores de los graves hachos que suceden”, lo que significaba que le exigían a Onganía mas participación en el gobierno y mas represión al pueblo, además de representar una velada amenaza al poder de Onganía.

El 29 de mayo, día del ejército y primer aniversario del cordobazo, un grupo secuestra de su casa al militar que para muchos de sus camaradas debía ser el sucesor de Onganía y ya estaba formando un partido político, se trataba del general Pedro. Aramburu, que fue detenido en su casa particular y sometido a juicio revolucionario y posteriormente condenado a muerte. En Buenos Aires la prensa recibió un comunicado que decía: “ Perón Vuelve, 1 de junio de 1970 – Comunicado n*4. al Pueblo de la Nación: La dirección de Montoneros informa que hay a las 7 hs. en punto Pedro Eugenio Aramburu fue ejecutado. Que Dios se apiade de su alma. Perón o Muerte ¡Viva la Patria! Montoneros.

Para los militares que ‘no gobiernan ni co-gobiernan’, según sus propias reglas, romperlas no significaba gran cosa, ya que tienen en su haber una larga historia de desprecio a las leyes y las reglas. Así es que al poco tiempo, Ongania es retirado del poder por sus propios compañeros de averías, no sin antes armar un simulacro de enfrentamiento que incluyó rodear la casa rosada donde éste se hallaba amotinado y jurando a las tropas sublevadas que resistiría hasta las últimas consecuencias. Por cierto que nada de eso sucedió y se entregó sin pena ni gloria a las pocas horas, y aunque todos ellos dijeron que había decisión de abrir fuego en cualquier momento, el pueblo, cansado de esas bravuconadas mas propia de un sainete, siguió organizando la rebelión por abajo.

Lanusse toma la voz cantante y asegura : “…Quiero poner fin de una vez por todas a la costumbre de elevar al Comandante en jefe del Ejército a la Presidencia…”. Esta declaración, dicha con el uniforme de gala y con cara de póker, hizo creer en principio a algunos incautos que era un llamado a elecciones, pero otra vez cambió de idea y al otro día nombran al general Roberto Levingston como presidente, un militar de inteligencia que vivía en Estados Unidos desde hacía años, por lo que tuvieron que traerlo rápidamente al país para que asuma.

A los 13 días de asumir Levingston, en el pueblo de La Calera (Córdoba) un grupo guerrillero toma la comisaría, el banco y se llevan 10 millones de pesos, hecho asumido por Montoneros, poco después la policía encuentra el cuerpo de Aramburu.

Las acciones se suceden, se produjo un ataque con bombas en la Escuela Superior de Guerra y pocos días después hubo una incursión a Garín que fue mas compleja e impresionante, donde participaron 36 guerrilleros, fue tomada la comisaría, el bar, la radio, la estación del Ferrocarril, tomaron todo el dinero que pudieron y se retiraron, todo eso en 11 minutos, el hecho fue ejecutado por la F.A.R. (Fuerzas Armadas Revolucionarias).

Como para no dejarlo ni respirar, a los 4 meses de asumir Levingston, es muerto José Alonso, otro sindicalista burócrata despreciado por los trabajadores. La actividad guerrillera siguió sin tregua durante 1970, las F.A.R. atacaron 2 bancos en Córdoba y La Plata, los Montoneros se llevaron 8 millones de pesos de una oficina de Correos de Córdoba, las F.A.P. atacaron una comisaría en Escobar, sin duda los grupos guerrilleros estaban incrementando la escalada de sus operaciones, en ese tiempo dinamitaron una comisaría en Santa Fe, reunieron 88 millones de pesos al tomar una estación en Bariloche y 122 millones en la provincia de Córdoba.

Levingston es advertido que nuevamente la Provincia de Córdoba estaba gestando otro ‘cordobazo’ organizado por obreros y estudiantes, nombra como gobernador a José C. Uriburu. Éste afirmaba que la conspiración subversiva era semejante a una víbora que prometió decapitar rápidamente, no obstante la bravata de este personaje, a los 3 días Córdoba estalla nuevamente en otro movimiento que la gente llamó ‘el Viborazo’ , como forma de reírse del exabrupto de Uriburu, que a los 2 días fue depuesto. Levingston criticó duramente la forma en que Lanusse había manejado el incidente y destituyó a éste como Comandante en Jefe de ejército, pero Lanusse, en otro golpe palaciego, le arrebata el poder a Levingston y esta vez, y sin recordar su promesa…se autoproclama presidente…era el mismo que juró que pondría fin a la costumbre de elevar a la presidencia al Comandante en Jefe del Ejército… Por su historial militar de hombre duro, los grandes capitales y las empresas monopólicas esperaban que con su mano dura le pusiera freno a la lucha popular, pero claro, una cosa era reprimir a los trabajadores desarmados y otra era enfrentarse a un pueblo que se empezaba a levantar en armas…